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Radicales libres.

Radicales libres.

El oxígeno nos da la vida, pero a cambio hemos de pagar un alto precio: el envejecimiento, la enfermedad y la muerte. Conforme pasa el tiempo y avanzas en estas líneas, estás oxidándote (envejeciendo). Aunque, para no comenzar de forma tan pesimista, vamos a considerarlo desde otra perspectiva: el proceso de OXIDACIÓN también indica que estás vivo. Por tanto, es un mecanismo natural e incluso necesario para mantenernos saludables. .

La vida nos ofrece constantes ejemplos de los efectos negativos del oxígeno, Si no protegemos los metales se oxidan; si cortamos una fruta y la dejamos descubierta, cambia su color, se está oxidando; igual ocurre con las grasas como el aceite o las mantecas, si las dejas al descubierto, huelen a rancio, están oxidadas.
En nuestro interior ocurre algo similar, el oxígeno es necesario para la obtención de energía necesaria para que las células actúen con normalidad. Pero durante este proceso de producción de energía se generan residuos, muy tóxicos y reactivos a los que conocemos como Radicales Libres. .Estos radicales libres se forman de manera habitual en el cuerpo al metabolizar el oxígeno, así que a la vez de alimentar nuestras células, el oxígeno de nuestra respiración nos está oxidando. Paradojas de la vida.

Qué son los Radicales libres?
Estas partículas son átomos que cuentan con un electrón desparejado en su composición, y para intentar conseguir estabilidad, roban electrones a otros átomos que, a su vez, pasan a convertirse así en radicales libres. Esta reacción en cadena provoca la destrucción de las células, de manera que los radicales libres son uno de los principales responsables del envejecimiento prematuro y de la aparición de enfermedades degenerativas .

¿De dónde proceden?
Además de la oxidación celular hay otros factores que que los ocasionan , como los rayos ultravioletas, una mala alimentación , los contaminantes atmosféricos y el sedentarismo .
Sus efectos:
Enfermedades cardiovasculares. Los RL provocan que el colesterol se adhiera a las paredes de las arterias generando aterosclerosis coronaria o isquemia..
Enfermedades degenerativas tales como , diabetes, cataratas, patologías inflamatorias o alzhéimer.
Cáncer. Los RL dañan el DNA de las células alterando el código genético se altera. provocando así el desarrollo de tumores y cáncer.
Envejecimiento. El estrés oxidativo causa la aparición de arrugas debido a la degradación de proteínas que protegen la piel, degeneran el colágeno, elastina y los lípidos.
– A nivel cutáneo: arrugas, flacidez de la piel, manchas de pigmentación, pero también cáncer de piel.
– A nivel pulmonar causan fibrosis que es responsable de la bronquitis y del cáncer de pulmón.
– A nivel articular, son una de las causas de la osteoartritis o enfermedades inflamatorias como la artritis.

Los antioxidantes son la solución.

Como mecanismo de defensa natural , el cuerpo genera sus propios antioxidantes que junto con el sistema inmunitario, forman las dos líneas de defensas naturales de nuestro organismo. Son sustancias activas entre las que se pueden encontrar enzimas, vitaminas, minerales, fitonutrientes y productos naturales. Su misión es la de donar desinteresadamente el electrón que necesita el radical libre para conseguir su ansiada estabilidad y así neutralizarlo, evitando que circulen libremente por el organismo y su perjudicial efecto sobre la salud

¿Dónde los encontramos?

Sin entrar en profundidades, quizás os suena el resveratrol de la uva, el licopeno del tomate, el betacaroteno de la zanahorias , la vitamina C de los cítricos, la vitamina E del aceite de oliva, y . LOS FLAVONOIDES DEL PROPÓLEO, las enzimas de la miel y en minerales como el zinc y Selenio.
Este artículo que parece estar fuera de lugar en una página de apicultura es la base de la que partimos para concienciar de la importancia de los antioxidantes y como los productos de la colmena pueden ser una alternativa saludable. . Este será el objeto de nuestro próximo artículo.
Si no quieres sufrir las consecuencias de la oxidación puedes dejar de respirar (quizá el envejecimiento no era tan malo).


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